El café sostenible de Costa Rica
Tal vez el aspecto más importante de la producción de café es el menos evidente. Al ofrecer por más de dos siglos un cultivo rentable al campesinado, la producción de café de Costa Rica ha contribuido significativamente a su prosperidad en las zonas productoras y a frenar la migración hacia las ciudades.
Producción agrícola
En términos generales, en las plantaciones de café costarricense no se usa insecticidas; el control de malezas se efectúa con una mezcla de químicos y trabajos manuales. La aplicación de los químicos se hace en forma racional y manual de planta a planta y no aérea. De hecho, a diferencia de otros cultivos, no se ha denunciado contaminación alguna de aguas por los agroquímicos utilizados en el cultivo del café.
En la fertilización, Costa Rica es el lugar donde es menos intensiva. Se usa normalmente 2 aplicaciones de fórmula completa (18 N 2 P-15 K) equivalentes a 715 kg/Ha., complementados con una aplicación de una fuente de nitrógeno (NH4NO3) de 285 kg/Ha.
En la mayoría de los cafetales costarricenses se trabaja con sombra intercalada. Esto tiene varios efectos positivos: la descomposición de las hojas devuelve abundante materia orgánica al suelo; adicionalmente, en las plantaciones de alta pendiente contribuyen a impedir la erosión. Las fincas cafetaleras constituyen, después de los bosques naturales, el segundo “bosque” en importancia en Costa Rica, contribuyendo con la conservación de las cuencas hidrográficas y a limpiar el ambiente.
Efectivamente, de acuerdo con estudios del Dr. Fournier Origgi, biólogo de la Universidad de Costa Rica, dos hectáreas de café eliminan tanto dióxido de carbono del aire como una hectárea de bosque tropical virgen.
El beneficiado del café:
Es inevitable que el beneficiado de café produzca desechos. Para producir 46 kg (100 lbs) de café oro, es necesario procesar entre 5 y 6 veces ese peso de café en fruta.
Para eliminar algún tipo de contaminación, en 1992 el Instituto del Café de Costa Rica, en conjunto con el Ministerio de Salud, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados y el Servicio Nacional de Electricidad, suscribió un Convenio Interinstitucional que trazó un programa de transformación industrial en el beneficiado húmedo, que le ha costado al sector más de $100 millones de dólares.
Desde la cosecha 1996/97, las plantas beneficiadoras costarricenses hicieron esas transformación como requisito para operar, entre ellas, el tamizado de las aguas para eliminar filamentos suspendidos de pulpa; la recirculación de las aguas con el fin de disminuir la cantidad de agua usada; el despulpado y transporte de la pulpa sin agua para disminuir la contaminación y el tratamiento primario de las aguas residuales en sedimentadores. El propósito fundamental de este diseño alternativo de flujo es eliminar en lo posible el contacto de la pulpa con el agua.
El uso del agua se mantiene solo para el lavado y transporte del grano ya separado de la pulpa. De los desechos producidos, la pulpa se usa como abono orgánico. La cáscara, conocida como pergamino, es quemada para generar energía requerida para el proceso de secado del grano.
El café sostenible de Costa Rica se produce en plantaciones con alta diversidad biológica y con bajas aplicaciones de agroquímicos. Conserva los recursos, protege el ambiente, produce eficazmente, compite comercialmente y refuerza la calidad de vida de los agricultores y la sociedad como un todo.
Cuando la producción de café es sostenible, los cafetales conservan los ecosistemas y la vida silvestre; dan Sombra, que se compone de varias especies de árboles que, después de los arreglos, mantienen entre el 20 y el 50 % de sombra, dependiendo de la zona donde se localice la plantación.
Para la conservación de suelos se realiza prácticas que previenen la erosión como siembras a contorno, zanjas de ladera, barreras vegetativas, coberturas, etc.
En cuanto al manejo de malezas los suelos conservan cierta cantidad de malas hierbas para su protección. Se hace por medio de chapeas y, cuando se justifique el uso de herbicidas, se selecciona aquellos de baja toxicidad para el hombre, que sean degradados en el suelo y de acción lenta, como el glifosato.
Para la fertilización se hacen análisis de suelos que indican los abonos más adecuados en la menor cantidad posible y preferiblemente con abonos orgánicos.
Para el control de enfermedades se selecciona el fungicida y la dosis más adecuada y, de ser posible, se aplica solo en los parches afectados.
Cuando se controla las plagas, en los cafetales existe gran diversidad de insectos, algunos dañinos y otros benéficos, que se mantienen en equilibrio natural, que puede alterarse por alguna mala práctica.
La cosecha es un aspecto muy importante en la calidad del café, ya que es la culminación de todo el proceso de producción. Se debe recolectar el fruto en el punto ideal de maduración, nisobremaduro, ni pintón, mucho menos verde, sin impurezas y entregado al beneficio el mismo día de recolección.
Para garantizar que el producto que le llega al consumidor cumple con la caracterización de este tipo de café, debe estar debidamente certificado. Por eso se creó el SELLO DE CAFÉ SOSTENIBLE mediante el Decreto Ejecutivo 30938 del Ministerio de Agricultura y Ganadería, MAG.
Se le encarga a la Gerencia Técnica de Acreditación y Registro de Agricultura Orgánica del MAG la certificación y al Instituto del Café de Costa Rica, ICAFE, la realización de las inspecciones. La certificación no tiene costo para el caficultor.
Variedades: búsqueda y selección de resistentes a plagas del suelo como estrategia de disminución en la aplicación de insumos y la selección de materiales resistentes a otras enfermedades no presentes aún en nuestra caficultura.
Sistemas de Manejo: investigaciones del asocio de café con especies maderable para determinar la convivencia económica de ambas especies. Se realiza investigaciones sobre la relación de frutales de potencial económico, sistemas de producción de bajo uso de insumos químicos con sistemas de producción orgánicos, con el objetivo de ofrecer al productor una curva de producción de las diferentes opciones.
Fertilización: se ha incrementado el uso de la broza descompuesta de café como fuente de abono orgánico; investigaciones realizadas por más de ocho años demuestran los beneficios de usar la broza sola o en complemento con el fertilizante químico.
Uso de subproductos del beneficiado: las prácticas de lombricomposteo como fuente de alimento para peces y ganado y el uso de biogás de los reactores anaerobios son algunas de las prácticas que se fomenta entre los productores de café como forma de eliminar la contaminación que generaba el beneficiado.
Tratamiento de aguas residuales: gracias a la investigación, la planta industrial ha sufrido una serie de cambios. En los últimos años, los beneficios de café pusieron en práctica medidas como el chancado en seco, recirculación de aguas, transporte de la pulpa del café en seco, tamices para la retención de sólidos y partículas gruesas y tratamientos finales de las aguas usadas en el transporte y lavado del café.
Con los cambios en el proceso de beneficiado de un menor consumo de agua y un casi nulo contacto de la pulpa del café con el líquido, se garantiza que las aguas residuales no sean un factor de contaminación de los ríos.
Acciones políticas: existen convenios interinstitucionales del sector cafetalero y entidades de salud y ministerios que exigen que se cumplan los estándares máximos permitidos de descarga del líquido usadas en los beneficios, por lo que todas las plantas deben tener tratamientos finales de agua y utilizar la menor cantidad posible en todo el proceso.
Se ha tenido gran preocupación también por la conservación, cuido y explotación racional de los recursos naturales. El 31.2 del área nacional se encuentra como áreas protegidas bajo reserva forestal en comparación con las casi 100 mil hectáreas de producción de café que representan cerca del 1.96% del área total del país.
Se crea mediante Ley, la Comisión Nacional de Agricultura Orgánica que fomenta la producción de cultivos con un menor uso de agroquímicos. El Instituto del Café de Costa Rica acordó en 1996 registrar por separado la producción y venta de café orgánico para tener control sobre este tipo de producción e ir fomentando su explotación.
A raíz de eso se firmó un Convenio de Cooperación con la Asociación de Agricultura Orgánica para desarrollar planes conjuntos de investigación y transferencia de tecnología hacia los productores interesados en este tipo de cultivo.